Pequeño pero conciso

Mejor ser feliz en cualquier lugar, en cualquier momento, contra cualquier ente y circunstancia, con una armadura, que brilla como el sol, intensamente como el arma que uno porta, sin miedo ante cualquier adversario, incluso contra aquellos que llevan consigo un arma de muerte, aún cuando no lleve la misma arma, porque yo la manejo, no apartaré la energía de su cuerpo, él podrá arrancarme el alma, ya he vencido la batalla, ya he aceptado  que la muerte no es necesariamente la pérdida de la vida, porque en realidad, nunca la tuve.

 

Pequeño engrane, disfruta tu estadía en esta gran máquina de sueños, muchos tratarán de quitarte tu lugar, no les correspondas a sus insultos, pero tampoco los ignores, ellos necesitan tu ayuda, al igual que tú, quieren seguir escalando.

 

Los miedos te consumen y confunden, te hacen creer que eres pieza importante en este pedestal, cuando en la base jamás estuviste ni estarás. No eres más que un simple rayón entre los millones de rayones que hay.

 

No cambiarás el mundo que te rodea, él te cambia a ti, esfuérzate, sin tratar de recibir algo grande como lo que supones has hecho, porque en sinceras palabras, no lo es, porque la misma realidad, es una simple ilusión. Ese punto que representas es minúsculo, diminuto, algo que a simple vista no se ve, lo que has hecho lo es aún más.

 

Gran ilusión la que vives, envidias al de enfrente, odias al de atrás, amas al de la derecha e ignoras al de la izquierda. Haces esfuerzos porque te vean, cuando no haces verdaderos meritos para que lo hagan.

 

Difícil olvidar lo que te han hecho otros, pero, ¿en verdad te lo han hecho ellos, o te lo has hecho tú mismo?

 

Sigilosamente caminas en la oscuridad, son tus miedos los que te persiguen, estos son los que escuchas. Una mano fría y horrorosa se postra ante ti, un segundo después desaparece, juras que lo has visto y es verdad, sí lo has visto, él ha estado ahí. No tienes que temer, jamás te hará daño, no te cortará con su navaja, la trae envuelta en su bolsita, sólo ha venido porque tú lo has llamado, él es tu guardián de aquella emoción que un cuerpo físico te hizo, ese que sí te cortó.

 

Ya no sufras, esos recuerdos seguirán ahí, únicamente aprende a lidiar con ellos, de los demás, no te preocupes en demasía, que al fin y al cabo, lo peor que te puede pasar, es morir. Nada impresionante.

 

¿No crees?

 

Mejor por gusto que por susto.

 

Castellanos Aguilar Kevin Rogelio